martes, 22 de abril de 2008

LAS VENTAJAS DEL FACEBOOK

La semana pasada encontré en el periódico El Colombiano el escrito de una de sus columnistas semanales, que daba unas razones personales para no pertenecer a ninguna comunidad virtual, principalmente hablaba del FACEBOOK.

No puedo negar que todas sus razones son dadas desde el interior de sus ser, pero de la lectura de su artículo encuentro una serie de imprecisiones o falta de educación informática básica que me obliga a refutar ese punto de vista, y más aún cuando está en un medio de comunicación masivo que puede de una u otra forma crear opinión, y sería imperdonable que ésta surgiera de una desinformación.

Empecemos por hablar de la vida diaria, ésta nos ha hecho poseedores de una serie de elementos que nos permiten hacer un sinnúmero de filtros para escoger a nuestros amigos, una vez se decide a que persona se deja entrar en la vida automáticamente se clasifica para saber que tan íntimo puede ser ese “amigo”, ya que estos van desde los del colegio, la cuadra, el trabajo, los de la pareja, los de a raticos, los verdaderos, o los simples conocidos.

Con estos comparto desde horas de trabajo y de conversación insulsa, hasta futbol, damas o caballeros, secretos de alcoba, secretos de negocios en fin dependiendo de nuestra manera de pensar y sentir le damos al otra la información que nosotros consideramos pueda manejar, compartimos viajes individuales o compartidos, fotos de nuestras fiestas, ahora videos, en fin todo depende de nuestro querer, y de lo que creemos de este otro.

Algunos tienen muchos amigos, lo que los abuelos criticaban y denominaban ser amigueros, otros tienen muy pocos y también eran llamados cusumbosolos, otros están en un rango “normal” ni muchos ni pocos sólo lo que ellos consideran necesarios, todo depende otra vez de nuestro deseo.

En la vida encontramos esos amigos que viajan cada año a hermosos y distantes lugares en el mundo y traen unas fotos espectaculares, otros no nos gustan las fotos y nos vemos en calzas prietas cuando algunos de nuestros amigos nos dicen en una visita: a ver mostranos unas foticos, pero esto no hace que pensemos en no tener amigos o que seamos menos atractivos para ser amigos de otros, simplemente no tenemos fotos.

Veamos ahora lo que sucede en el ciber espacio, yo me inscribo a una comunidad, coloco los datos que deseo colocar y coloco el grado de accesibilidad que tendrán a estos, va desde todo el mundo hasta solo mis amigos, los cueles yo escojo y permito.

Con esta comunidad interactúo en espacio o grupos para todo el mundo, me llegan invitaciones las cuales tengo el poder de aceptar o no, comparto mis fotos y mis video con quienes yo decido, incluso es mas seguro que la vida misma porque no corro el riego de que un aguardiente de mas me haga aflojar la lengua.

El MNS no solo sirve para comunicarse vía emocticon, existe la probabilidad de vernos a través de webcam y de comunicarnos con voz en vivo, el correo electrónico nos ha hecho muy cercanos pues si bien el teléfono nos permite esa comunicación verbal, también es cierto que la no contestación o el teléfono celular apagado nos lleva a esa dicotomía si se deja o no se deja mensaje, la mayoría optamos por no dejarlos, lo que corta la comunicación, no obstante el correo electrónico nos permite dejar el mensaje así el receptor no lo vea de forma inmediata.
Si bien es cierto que existir no depende de pertenecer a una determinada comunidad virtual, también es cierto que es una forma de existir en un mundo que cada día copia más al real, pues ese es su fin, proporcionar un ambiente agradable y lo mas familiar posible.

No podemos desechar las relaciones que surgen de una comunidad por el simple hecho de ofrecer muchas opciones, pues sería tanto como afirmar que en Medellín con sus millones de habitantes no puedo encontrar un verdadero amigo.

Voy a dar una serie de ventajas, que yo veo, de estar en estos grupos:
- Encontré amigos que están en otros lugares del mundo y que nunca hablábamos ahora este medio de comunicación nos permite estar más cerca, o que lo diga mis primos Pablo y Juan con las conversadas que nos hemos metido.
- O que decir de los amigos de universidad que hace más de diez años no sabia de hechos y que ahora nos encontramos nuevamente.
- Como dejar de lado aquellos compañeros de oficina que me han permitido conocer sus mundo familiar a través de las fotografías.
- Que decir de las fotos que le mando a mi cuñada a Sopetran de todas las reuniones familiares que por razón de trabajo ella se pierde.
- Como estará de contenta una amiga de República Dominicana que puede ver las fotos del cumpleaños de un familiar.

Recordando a un pesador me atrevo a decir hoy: lo que vaya a pensar, piénselo bien y lo que vaya a decir dígalo mejor, a esto agregaría: cuando maneje medios de comunicación masivos nunca olvide las enseñanzas del filósofo antioqueño Estanislao Zuleta y recuerde que cuando usted escribe esto ya no pertenece a su esfera íntima sino que es de cada uno de sus lectores y muchas veces sus letras sirven de Rosa de los Vientos de sus asiduos lectores.


martes, 15 de abril de 2008

DE LAS INCONGRUENCIAS

Toda la vida adulta es un camino hacia la congruencia, lo más difícil es que la congruencia es algo social y no personal.

Con el tiempo vamos descubriendo nuestra esencia y nos vamos volviendo congruentes con ella, pero allí empiezan los problemas puesto que si nuestra persona es un poco distinta del ideal de nuestro entorno entonces allí empiezan a decirnos que no debemos ser tan congruentes con nuestra realidad sino con la realidad del medio, y no estoy hablando de los extremos sicóticos o violentos o cualquier aberración que atente contra la supervivencia del medio ambiente o de la supervivencia del ser humano.

Empecemos con lo fácil, las incongruencias de lo que consideramos lógico:
- En la escogencia de Universidad, cuantas veces su elección depende de situaciones como: Está más cerquita, Es en la que estudió toda mi familia, Es la única que me pueden pagar, en fin de todas las personas que conocemos cuantas han dicho: Es la de mejor profesorado según el estudio de las hojas de vida de los profesores, o es el mejor pensum del mercado, o es la que me gusta por la posibilidad de empleo para sus egresado, en fin la escogencia depende de cosas externas y casi nunca de internas o de nuestra querencia.
- Otra cosa, y no se si antes o después o instantáneamente a la escogencia de universidad es la de escogencia de que se va a estudiar, Primero va el curso vocacional, la opinión del papá y más si es el que paga la universidad, o escoger la universidad está de moda, o la que no tiene matemáticas o la que no tiene filosofía, o en la que va a estudiar la mitad del once, en fin casi siempre depende de muchas cosas, pero depende realmente de nuestras capacidades, de nuestras aptitudes y/o de nuestros auténticos deseos, y eso que no voy a hablar de aquellos que cambian la carrera cada seis meses o peor aún aquellos que cuando ya van terminando deciden que eso no era lo que querían estudiar.
- Y ahora para la mayoría nos metemos en los vericuetos de la convivencia con alguien, llámese matrimonio, enmosamiento o cualquier otro tipo de convivencia y allí vuelve y juegan los elementos externos, que está buena, que es linda, que es buena persona, que está en embarazo, pero cuántas veces opera el que tiene una gran personalidad, el es sincera, en fin cuántas veces es relevante lo importante, aquello que no tumba el tiempo ni la gravedad, aquello que no cansa con la repetición diaria, lo que alegra el alma y no el cuerpo.
- Después de esto viene otro royo, los hijos, y cuántos de estos son deseados, planeados y sobre todos vienen como producto de unos padres los suficientemente maduros para encarar la responsabilidad de ser padres
- Y con estos últimos si que vienen cosas, que si niño que si niña, pero en ningún momento que si va ser un buen ser humano, pareciera que la salud física, la apariencia y el sexo lo fuera todo. Pero ellos nos ponen la tapa para la incongruencias, y eso lo vivimos cuando es el primer día de clase si ellos se quedan llorando les decimos que dejen de ser bobitos pero si se quedan felices ahí es donde nos sale lo peor y lloramos porque un infante asume seriamente su primera obligación escolar y nosotros le mentemos cosas de sentimientos e ingratitudes.
Demos un salto hacia la edad madura y allí logramos encuadrarnos en lo que queremos y no queremos, y empezamos a tomar decisiones sobre nuestra vida y allí comienza el viacrucis.
- Decidimos separarnos, divorciarnos, ir al tribunal eclesiástico y anular el matrimonio o simplemente dejarnos, y nos volvemos los más malos del mundo, nos dicen que es una cruz que se debe cargar por más pesada e ignominiosa que esta sea que si nos equivocamos de malas pues esa fue la elección que tomamos, pues no señores si las cosas no funcionan es mejor salir a tiempo a no ser triste eternamente.
- Pero logramos esto y nos quedamos viviendo solos, y esto es otro problema si empezamos a rumbear mucho la cantaleta por el libertinaje y si nos encerramos juiciosos pues también cantaleta porque nos embobamos y la supuesta tristeza nos esta matando. No señores es una decisión seria y meditada el vivir nuestra vida de la forma en que queramos.
- Pero bueno las incongruencias puede que no sean nuestras sino de los demás y así se pone la vida cuando ya nos sentimos adultos y actuamos como tales y tenemos una posición seria frente a la vida y frente a lo que queremos ya en ese instante volvemos a estar fuera de foco para los demás ya no somos maduros sino resabiados, caprichosos, beatos o cualquier calificante que pueda ponernos en contravía de lo que hemos obtenido y allí señores es donde debemos de dar buenas y serias respuestas, llegamos a un punto en la vida que nos colocamos la ropa que queremos, estudiamos o no estudiamos si queremos, vivimos con alguien si es nuestra elección, mejor dicho somos los dueños de nuestras vidas y ya no necesitamos copiloto, a esto le llamo yo congruencia.

Pero no podemos llevar la incongruencia única y exclusivamente al nivel personal, lo debemos de poner a otros niveles y aquí van unas perlitas:
- Somos uno de los países más felices del mundo y tenemos la guerrilla más vieja del mundo, nuestros senadores estan en la cárcel o próximo a estarlos, tenemos una gran cantidad de niños desescolarizados, el maltrato familiar no ha disminuido ahora se pasó a los dos lados de la relación, seguimos teniendo un altísimo porcentaje de desempleo, nuestra economía esta en su mejor época y todavía los niños se mueren de hambre, en el Chocó nadie sabe que se hicieron cinco toneladas de alimentos para los niños, tenemos una democracia obtenida con votos pero todavía la gente considera que esto no es bueno, en fin que podemos esperar donde un senador va a tomar su detención como unas vacaciones, pero peor aun después de muchos años nuestros país todavía se divide en bando cuya única diferencia de fondo es para donde echan la plata de sus negocios turbulentos y peor aún los entes de control siguen ganando tan poquito que cualquier delincuente de medio pelo se puede gastar en una fiesta lo que esta gente se gana en un mes o más.

Así pues señores la invitación es a ser congruentes con sus pensamientos, con sus decires y con sus acciones. Lo que piense piénselo bien, los que diga dígalo mejor y lo que haga que sea una reflejo de las dos anteriores.

Me quiero despedir con una buena frase de una santa: Señor ayúdame a querer poco y que lo poco que quiera lo quiera poco.

lunes, 7 de abril de 2008

DE LOS MIEDOS

Hablar de los miedos es meterse en los bosques intrincados de la sicología, sus fobias y demás materias. Pero como no soy sicólogo sólo me preocuparé por los miedos que he sentido, que siento o que he visto a otros padecer.

Yo creo que los miedos en su gran mayoría son aprendidos pues cuando mi hija vivía conmigo habíamos logrado superar el miedo a los payasos, a los muñecos de los supermercados, y a los animales y cuando volvimos a salir los payasos, los muñecos y una gran parte del reino animal producen un esconderse detrás de papá, o a lo menos un fuerte apretón de mano, a mi manera de ver estos miedos hacen parte de los estudios de las ciencias del comportamiento.

Otros miedos son aquellos patológicos como mi miedo inmanejable a volar, me encanta la comodidad de los aviones, la posibilidad de viajar de una ciudad a otra sin el cansancio de diez horas o más en una vehículo, pero cuando me monto a ese aparato mi corazón, ahora mi diabetes, y todo mi ser me recuerda ese miedo visceral a estar volando, siempre he dicho que si Dios hubiera querido que el hombre volara le hubiera puesto un motorcito en el culo. Bueno este es otro tipo de miedo para que lo estudien los sabios.

Pero los miedo que mas sentimos son aquellos que más negamos, pues cuan miedo despierta un pequeño zancudo que ronda la cuna de tu hijo y te convierte en un despiadado cazador, o ese miedo que te paraliza cuando tu hijo se cae y se lastima el chichón que ya tenia en la cabeza, o aquel miedo que produce el día de entrega de notas o de exámenes. Yo creo que aquí el miedo es a asumir la responsabilidad de no haber fumigado, o de no haber cuidado al niño para que no se cayera, o de no haber estudiado para el examen o durante el semestre, en fin es ese miedo a que los hechos te demuestren tu irresponsabilidad o la falta de previsibilidad.

Existen otros miedos como son los del compromiso. Ese compromiso contigo, con tu salud, con tu trabajo, con tu mundo, en fine es mas fácil no ir donde el médico para que no te digan como van tus enfermedades entonces así darle rienda suelta a la falta de dietas, prescripciones medicas, trago desmedido y en fin miles de cosas que te matan lentamente y que tu de modo gracioso dices que no tienes afán, pero olvidas que tarde que temprano tu médico no te va a decir que estas enfermo porque te va a decir que estas muriendo; también es fácil dejar de lado las responsabilidades laborales y encontrar mil excusas para no hacer o hacer poquito, las excusas van desde la posibilidad de un traslado, pasando por el poder, la rosca política, la falta de personal o los años en una institución, en fin es mas fácil no hacer que hacer, por último es más fácil decir que los otros dañaron tu alma, que te estas cuidando de cualquier mal que tu pudieran volver a hacer en fin es mas fácil buscar chivos expiatorios que asumir tus responsabilidades.

Existen miedos que dependen de ciertas circunstancias, y para esto hablaré específicamente del miedo a perder la independencia. Con mucho trabajo logramos apropiarnos de nosotros, aprendemos a ser buenas compañías para nosotros mismos, logramos ser un buen compañero de viaje para nosotros mismos, y en ese duro trasegar de conocernos y volvernos mejores la vida nos pone frente a ese parangón de compartir la vida con alguien, los que vivimos solos sabemos de que hablo, esa independencia no es fácil de dejar, ese sentirnos amos de nosotros y de nuestro espacio, esa compañía rica de nuestros propios pensamientos o de nuestros silencios que no son rotas por nada ni por nadie, en fin cada día nos convertimos en seres más individuales y la compañía permanente nos aterra, los ratos son buenos desde que no riña con nuestra rutina, en fin es difícil superar ese miedo a compartir espacios, pero este se enfrenta al miedo a llegar a la ancianidad sin nadie al lado, porque algunos hemos aprendido que nunca estamos solos desde que nos tengamos a nosotros mismos, pero la compañía material de ese otro nos pone a pelear con esta rica independencia; cual será la pregunta que debemos de formular frente a esto, no lo se, lo único que se es que el compartir de una vida debe tener cimientos más sólidos que los simples formalismos sociales, o el querer tener un estatus social, y mucho menos el cumplir un sueño creado por las fantasías de príncipes y princesas. En fin cuando los que nos hemos recuperado para nosotros mismos decidamos compartir esta vida, las razones no serán las de todo mundo puesto que ya aprendimos a ser responsables con nosotros y con los otros.

Pero el miedo que más me atormenta es el que me produce la pérdida de capacidades que produce la vejez, es un miedo doble que se combina con rabia. Me desespera la pérdida de memoria, de motricidad, de manejo de esfínter, en fin no se que es peor si dejar de darse cuenta de lo que esta pasando o darse cuenta que nuestro cerebro está en sus mejores días por toda la información que posee y que nuestro cuerpo no obedece. No les tengo paciencia a sus preguntas repetitivas ni a esas ganas de vivir en la calle con el riego de no saber quienes son o para dónde van, peor aún los reflejos que ya no son los mismos los convierten en un blanco fácil de ladrones, buses, bicicletas y mil cosas que les pueden causar daño. Y ahí radica parte de mi miedo, es la incapacidad de cuidarlos a todos, es el temor de que cuando llegue no tenga quien me cuide y en mi aspecto más personal es el inmenso temor de perder todos los días un poco más a ese tropos que todos los días se pierde más en su falta de memoria reciente que ya se está juntando con la memoria pasada, en fin ese inmenso miedo de no poder detener los pasos de la ancianidad en el cerebro de mi madre y tener la certeza de que en no mucho tiempo ese cordón umbilical se cortara del todo. Pensaran que soy un niño de mami que no ha salido de sus faldas, pues se equivocan pero eso no hace que me de menos miedo.

Así pues la lista de temores es muy larga y aquí puedes colocar muchos más temas, el miedo a no estar bello o bella, el miedo a no ser buena amante, porque los hombres somos malos polvos no malos amantes, el miedo a que se te caiga cualquier cosa, en fin es ese miedo a encontrarnos con la realidad lo que nos paraliza y no nos permite continuar.

Por eso la diferencia entre un cobarde y un valiente es que al valiente no le da miedo sentir miedo, así que amigos dejar de sentir miedo es una falacia, lo único que queda es saber a lo menos cuáles son los nuestros, por qué los sentimos y cómo los podemos hacer mas llevaderos.


martes, 1 de abril de 2008

LOS AMIGOS

Hablar de amigos o amistades siempre va a ser algo donde hay mucho de dónde cortar. Cada definición que encuentres está sujeta al que define sus amigos, los paisas para acabar de ajustar distinguimos entre amigos y conocidos. Por si esta disparidad de criterios no fuera suficiente dese pequeños nos enseñan que el mejor amigo puede llegar a constituirse en tu peor enemigo y paralelo a esto no dicen que debemos de tener amigos y cuando tenemos alguna discusión con nuestros amigos de juegos nos hacen dar la mano pidiéndonos que digamos la palabra: AMIGOS, la cual obtiene la misma respuesta: AMIGOS (no estoy diciendo que ciertos mandatarios parecieron niños obligados).

Bajo estos preceptos nos enfrentamos a esa necesidad de encontrar pares, compinches, amigos, parceros, etc. y entonces a punta de peleas vamos formando nuestra personalidad y creando una lista de requisitos para permitir que los prospectos de amigos se acerquen, al principio son muchos, luego son pocos y en algún momento de la vida nos quedamos sin amigos o porque consideramos que ninguno sirve o porque no le servimos a ninguno.

Con la adultez nos vamos dando cuenta que lo importante no es tener amigos excelentes e incondicionales sino simple y llanamente tener amigos, aquellos con quienes compartes las algunas veces eternas horas de trabajo o aquellos que a pesar de solo verlos cada año siempre están ahí y el reencuentro siempre es igual a como si nunca hubiera pasado el tiempo. Están también aquellos que son de segundos o de fiestas o el de la barra del barcito de cada ocho días, o aquel que solo vez cuando vas a futbol o a toros o aquel que le dices el flaco o el gordo y que siempre es tu compañero de juego dominical pero que nunca has conocido más que sus habilidades como jugador.

Los de mi generación y de pronto los de la siguiente tuvimos esa fortuna de hacer amigos en la esquina, en el colegio, en la empresa en fin en nuestro pequeño mundo y luego después de esto la modernidad no llevó a las salas de chat y allí encontramos los llamados amigos virtuales, pero siempre sabemos que es mejor aquel que ves a los ojos y no a través de una cámara, que es mejor ese que esta en el pueblo y que se demora unas horas para venir y no aquel que nunca vendrá desde el otro lado del mundo.

Lástima de las nuevas generaciones que no van a poder hacer amigos reales porque todo es mas fácil en el ciber espacio, aquí los amigos pueden ser lo que ellos quieren, nunca hay que volverlos a ver después de que uno los borra de la lista y son reemplazables con un click, allí encontramos amigas complacientes de solo un rato, en fin allí nosotros y los otros podemos ser lo que las palabras logren hacerles creer al que está al otro lado, lástima que la falta de léxico no los haga entender muy bien porque ahora los amigos son unos grandes sofistas.

Pero al fin y al cabo todos vamos necesitando un buen amigo y quizás algunos sean solo de momentos, o cual mejor amigo que aquel que ayudo al hombre de Nazaret a cargar su cruz, o aquel que paró el carro para no dejarnos sin balón con que jugar, o aquel que nos ayudó a recoger las hojas que se nos cayeron en media calle, o ese compañero amigo de oficina que con solo vernos llegar nos pregunta que nos pasó y nos escucha durante largos momentos sin decir nada, porque uno de los requisitos de un buen amigo es saber callar porque o sino cual es el encanto de los perros.

En fin amigo son aquellos con los cuales siempre contamos en los momentos más de nuestras vidas: en los más tristes, en los más alegres, en los más verracos o en los mejores. Yo creo que amigos son aquellos que nos dicen de frente lo que estamos haciendo mal sin importar que nos enojemos, amigos son aquellos que nos conocen con solo mirarnos, amigos son aquellos que aunque pase el tiempo sin vernos nunca merma su cariño, en fin amigos son los únicos capaces de pelear por nuestras ideas sin estar de acuerdo con ellas.

Lo peor de este asunto es que solo los que nos acompañen a nuestro entierro se darán cuenta cuan buenos amigos fuimos porque allí los “amigos” se van a dividir en dos, los que nos van a recordar por todo aquellos que hicimos, y los que van a recordar por todo lo que fuimos y estos últimos serán nuestros reales amigos.